28.7.12
Terminamos como empezamos, como dos perfectos extraños.
Y es ahí, en el momento en que todo acaba, cuando te das cuenta de que en realidad todo ha vuelto a empezar. Cuántas veces soñabas con deshacerte de su recuerdo, con sacártelo de una vez de la cabeza. Lo veías imposible ¿verdad? Pero no, todo es posible, lo que nos pasa es que nos obsesionamos demasiado, se nos mete una cosa en la cabeza, y ya no hay quien nos la saque de ahí. Y cuando menos lo piensas, de repente ocurre, desaparece de tu vida, y tú de la suya. Me resulta infausto que dos personas que un día fueron tanto terminen así, como empezaron al principio: como dos perfectos extraños. Pero al menos, eso me hace ver que me volví a equivocar, que no era el chico adecuado, que mi príncipe aún esta recorriendo mar, cielo y tierra, para llegar a donde yo estoy, darme la mano, y hacerme ver que el mundo es menos malo cuando tienes a la persona adecuada a tu lado.
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